jueves, 14 de junio de 2012

La primavera en Praga

Durante la Guerra Fría, la Primavera de Praga (en checo: Pražské jaro; en eslovaco: Pražská jar) fue un período de liberalización política en Checoslovaquia, que duró desde el 5 de enero de 1968 hasta el 20 de agosto de ese mismo año, cuando el país fue invadido por la URSS y sus aliados del Pacto de Varsovia (a excepción de Rumanía).

Este movimiento buscaba modificar progresivamente aspectos totalitarios y burocráticos que el régimen soviético tenía en este país y avanzar hacia una forma no totalitaria de socialismo, legalizando la existencia de múltiples partidos políticos y sindicatos, promoviendo la libertad de prensa, de expresión, el derecho a huelga, etc. Acabó en agosto de 1968, cuando las tropas del Pacto de Varsovia invaden Checoslovaquia y ponen fin al proceso de apertura política.

En junio de 1967, una pequeña facción de la Unión de Escritores de Checoslovaquia comenzó a simpatizar con socialistas radicales, especialmente Ludvík Vaculík, Milan Kundera, Jan Procházka, Antonín Jaroslav Liehm, Pavel Kohout e Iván Klíma. Varios meses después, en un encuentro del Partido, se decidió que las acciones administrativas se tendrían contra los escritores que abiertamente expresaron su apoyo a la reforma. Dado que solo una pequeña parte de la Unión apoyó estas tendencias, los miembros restantes fueron sometidos a la disciplina de sus colegas. El control sobre Literární Noviny y varias otras editoriales fue transferido al Ministerio de Cultura, e incluso miembros del Partido que más tarde se convirtieron en los principales reformadores —incluyendo a Dubček— apoyaron estas medidas.

A principios de los 60, Checoslovaquia era conocida oficialmente como República Socialista Soviética Checoslovaca (RSSC), experimentando una recesión económica, debido al modelo soviético de industrialización pobremente aplicado a Checoslovaquia. Checoslovaquia estaba ya bastante industrializada antes de la Segunda Guerra Mundial y el modelo soviético principalmente se centró en cuentas de economías menos desarrolladas. Novotný intentó reestructurar la economía, El Nuevo Modelo Económico de 1965 y estimuló el aumento de la demanda de reformas políticas.

En 1967, el presidente Antonín Novotný fue perdiendo apoyo. El Secretario General del regional Partido Comunista de Eslovaquia, Alexander Dubček, y el economista Ota Šik lo desafiaron en el encuentro del Comité Central, y Dubček invito al Premier Soviético Leonid Brézhnev a Praga en diciembre del mismo año. Brezhnev se sorprendió por la extensión de la oposición a Novotný y apoyó su dimisión como Presidente de Checoslovaquia. Dubček reemplazó a Novotný como Secretario General el 5 de enero de 1968. El 22 de marzo de 1968, Novotný perdió su presidencia y fue reemplazado por Ludvík Svoboda, quien más tarde dio consentimiento a las reformas.

La caida del muro de Berlín

El Muro de Berlín (en alemán Berliner Mauer), denominado oficialmente «Muro de Protección Antifascista» (Antifaschistischer Schutzwall) por la socialista República Democrática Alemana – RDA (Deutsche Demokratische Republik – DDR) tambien fue apodado «Muro de la vergüenza» (Schandmauer) por parte de la opinión pública occidental,1 fue parte de las fronteras interalemanas desde el 13 de agosto de 1961 hasta el 9 de noviembre de 1989 y separó a la República Federal Alemana de la República Democrática Alemana hasta ese año.2

El bloque oriental dominado por los Soviéticos oficialmente sostenía que el muro fue levantado para proteger a su población de elementos fascistas que conspiraban para prevenir "la voluntad popular" de construir un estado socialista en Alemania del Este. No obstante, en la práctica, el muro sirvió para prevenir la emigración masiva que marcó a Alemania del Este y al bloque comunista durante el período posterior a la II Guerra Mundial

El muro se extendía a lo largo de 45 kilómetros que dividían la ciudad de Berlín en dos y 115 kilómetros que separaban a la parte occidental de la ciudad del territorio de la RDA. Fue uno de los símbolos más conocidos de la Guerra Fría y de la separación de Alemania.3

Muchas personas murieron en el intento de superar la dura vigilancia de los guardias fronterizos de la RDA cuando se dirigían al sector occidental. El número exacto de víctimas está sujeto a disputas y no se conoce con seguridad. La Fiscalía de Berlín considera que el saldo total es de 270 personas, incluyendo 33 que fallecieron como consecuencia de la detonación de minas. Por su parte el Centro de Estudios Históricos de Potsdam estima en 125 la cifra total de muertos en la zona del muro.4

La CIA y La KGB

Placa de Pecho de la  CIA ( Central Intelligence Agency)
En los años de la Guerra Fría, los soviéticos y los norteamericanos fundaron nuevas instituciones para afrontar el conflicto. La Unión Soviética creo el Kominform, un organismo que agrupaba a los partidos comunistas de varios Estados; y de la fusión de antiguas instituciones surgió la KGB, tenebroso este encargado de defender el régimen soviético de posibles enemigos internos y externos.
Por su parte, los Estados Unidos no se quedaron atrás y crearon la CIA (Agencia Central de Inteligencia). Acusada recurrentemente de interferir en la política de otros Estados. También crearon el Consejo Nacional de Seguridad; a pesar de que la Guerra Fría no continúa, algunos de estos organismo siguen funcionando.

España en los años 40

El año del hambre (economia)

  1.  La época más trágica de la era moderna que España ha padecido es sin dudarlo la de los años cuarenta del siglo XX tras la Guerra Civil. Una recesión económica hizo estragos en un país dividido y maltrecho, donde, según las estadísticas, de una población de 26.000.000 de habitantes 300.000 habían tomado el camino del exilio, casi otro tanto abarrotaban las cárceles del gobierno fascista y, por último, mucho más de la mitad de la población restante, por falta del principal componente familiar que pudiera trabajar, muerto en la contienda o preso, que pudiera traer el sustento a la familia pasaba hambre y calamidades en una España católica que sin piedad disfrutaba ver a los ‘malos’ hermanos pagar sus pecados mientras la iglesia aplaudía los actos de nepotismo y excesos del gobierno. Como consecuencia de ello una plaga bíblica se extendió por todo el país con el hambre y las enfermedades como principales protagonistas que se cebó entre aquellos pobres represaliados que se habían convertido en los nuevos parias de la sociedad.
     
    En agosto de 1939 se implanta el racionamiento de la población y pronto se comprobó que los alimentos suministrados carecían del mínimo valor nutritivo necesario para la subsistencia ya que estaban compuestos de forma predominantes por garbanzos, patatas, boniatos, pastas para sopas, bacalao y muy de tarde en tarde por carne de membrillo, chocolate terroso incomestible y jabón. Como se puede comprobar el déficit de hidratos de carbono y grasas, así como la carencia de vitaminas, calcio y hierro era evidente. El pan, que antes era el alimento base de las familias modestas, se convirtió en otro apreciado artículo de lujo ya que su racionamiento, en el mejor de los casos, para aquellos que tenían una cartilla de racionamiento de tercera, las cantidades oscilaban entre los 150 y 200 gramos. Tras este desastre floreció un mercado negro de productos que por sus precios sólo estaban al alcance de privilegiados afectos al régimen fascista; el resto de la población se convirtió en devoradores de almortas, altramuces, salazones y castañas.

     

     

España en los años 40

La politica exterior de Franco (germanofilia)

 La política exterior franquista es una amalgama de resentimiento
nacionalista e impotencia. Tal deficiencia pudo estar acentuada
por la defectuosa información que se manejaba del medio internacional
debido al histórico desinterés por las cuestiones internacionales y a la
falta de profesionalidad de su aparato diplomático. Faltaba tradición burocrática
y planificación y había demasiada improvisación. La nueva configuración
del sistema internacional, regido por dos superpotencias extraeuropeas ideológicamente
contrarias, barrió cualquier esperanza y dejó a la diplomacia española
sin ningún proyecto.
Generalmente se ha observado la relación ente la España de Franco y la
construcción europea con un cierto reduccionismo, como un conflicto limitado
a las libertades democráticas que, si bien es cierto, no por ello resume
totalmente la realidad.
La relación entre España y Europa está salpicada de paradojas. Una de las
más sobresalientes es que Europa va a pasar de ser, en apenas quince años,
en la publicística del régimen, la representación de la "masonería internacional".


La germanofilia es la simpatía o admiración por la cultura alemana.
El término se usó especialmente en los siglos XIX y XX después de la unificación de Alemania y el auge del Imperio alemán. El término se usa no sólo políticamente sino también culturalmente.
En la Europa continental, a partir de finales del siglo XIX (fundamentalmente a partir de la guerra franco-prusiana de 1870), la dicotomía se producía más bien entre Alemania y Francia. Frente a los francófilos, los germanófilos elegirían alinearse con Alemania contra una Francia vista despectivamente como chauvinista.


España en los años 40

Serrano Suñer la represion de los disidentes (juicios sumarisimos militares y numero de muertos)


Ramón Serrano Súñer (Cartagena, 12 de septiembre de 1901Madrid, 1 de septiembre de 2003) fue un abogado y político español, seis veces ministro de los primeros gobiernos franquistas entre 1938 y 1942, ocupando las carteras de Interior, Gobernación y Asuntos Exteriores, presidente de la Junta Política de la Falange Española Tradicionalista de las JONS (1938), así como fundador de la organización no gubernamental ONCE (1938) y de los medios de comunicación Agencia Efe (1939) y Radio Intercontinental (1950).

Conocido popularmente con el sobrenombre del Cuñadísimo (al ser hermano político de Carmen Polo, esposa de Francisco Franco), Ramón Serrano Súñer fue uno de los principales artífices del Régimen en sus primeros años, tanto en lo jurídico como en lo político, siendo autor principal del Fuero del Trabajo (1938). Reconocido por su germanofilia, promovió el envío de la División Azul para luchar contra la Unión Soviética, como unidad militar integrada en la Wehrmacht, tras su destacada labor diplomática durante las negociaciones con el gobierno alemán que culminaron con el encuentro de Franco con Hitler en Hendaya del 23 de octubre de 1940.

Con el declive de la Alemania nazi, también decayó su buena estrella política, siendo destituido en 1942 y postergado por el Régimen.

España en los años 40

Tribunal de represión de la masonería y comunísmo 

El 1 de marzo de 1940, en España, se dictó la Ley para la Represión de la Masonería y el Comunismo. En su artículo N° 12 establece la creación y composición del Tribunal Especial para la Represión de la Masonería y el Comunismo. Las penas iban desde la incautación de bienes hasta la reclusión mayor. Los masones, aparte de las sanciones económicas, quedaban automáticamente separados de cualquier empleo o cargo de carácter público. Se establecieron penas de veinte a treinta años de prisión para los grados superiores, y de doce a veinte para los cooperadores. Fue suprimido el 8 de febrero de 1964, si bien gran parte de sus funciones se habían transferido al Tribunal de Orden Público creado en 1963.

Los archivos del Tribunal actualmente forman parte del Archivo General de la Guerra Civil Española, situado en Salamanca (España). Estos archivos incluyen las condenas por "delito de masonería". Su información es públicamente accesible.

 

España en los años 40

Fotografias de España en los años 40

 

 

                                                                           

viernes, 25 de mayo de 2012

La Guerra de Corea

La Guerra de Corea fue una guerra entre Corea del Sur, apoyada por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), y Corea del Norte, apoyada por la República Popular China, con ayuda de material militar de la Unión Soviética. La guerra fue el resultado de la división de Corea por un acuerdo de los victoriosos Aliados de la Segunda Guerra Mundial tras la conclusión de la Guerra del Pacífico al final de la Segunda Guerra Mundial. La península de Corea había permanecido ocupada por Japón desde 1910 hasta el final de la Segunda Guerra Mundial. Tras la rendición incondicional del Imperio del Japón, los estadounidenses dividieron la península por el Paralelo 38, el norte del cual quedó ocupado por tropas soviéticas y el sur por tropas estadounidenses.
El fracaso de la celebración de elecciones libres en toda la península en 1948 acentuó la división entre ambas partes, y el norte estableció un gobierno comunista. El paralelo se convirtió todavía más en una frontera política entre ambas Coreas. Aunque las negociaciones para la reunificación continuaron en los meses anteriores a la guerra, la tensión se intensificó con escaramuzas transfronterizas e incursiones en el Paralelo 38. La escalada de tensión degeneró en una guerra abierta cuando Corea del Norte invadió Corea del Sur el 25 de junio de 1950, en lo que suponía el primer conflicto armado serio de la Guerra Fría.
Las Naciones Unidas, y particularmente los Estados Unidos, acudieron en ayuda de Corea del Sur para repeler la invasión, pero en sólo dos meses los defensores fueron empujados al Perímetro Pusan, un área pequeña en el extremo sur de la península, antes de que los norcoreanos fueran detenidos. Una rápida contraofensiva de las Naciones Unidas devolvió a los norcoreanos más allá del Paralelo 38, casi hasta el río Yalu, y entonces entró en el conflicto la República Popular China del lado del Norte. Los chinos lanzaron una ofensiva que forzó a las Naciones Unidas a volver al otro lado del Paralelo 38, para lo que la Unión Soviética ayudó con material militar a los ejércitos chino y norcoreano. En 1953 la guerra cesó con un armisticio que restauró la frontera entre las Coreas cerca del Paralelo 38 y creó la Zona desmilitarizada de Corea, una franja de 4 km de anchura entre ambos países. Diversos rebrotes de lucha se siguen produciendo hasta la actualidad.
Con las dos Coreas auspiciadas por potencias extranjeras, la Guerra de Corea fue una guerra subsidiaria. Desde el punto de vista de la ciencia militar, combinó estrategias y tácticas de la Primera y la Segunda guerras mundiales: comenzó con una campaña móvil de rápidos ataques de infantería seguidos por incursiones de bombardeos aéreos, pero se convirtió en una guerra estática de trincheras desde julio de 1951.